
Las personas presumen que en algún momento la nasa encontró algo desagradable en las profundidades del mar y es por ello que se habrían enfocado en buscar e investigar planetas habitables, así como formas de vida en ellos.
Sin embargo, es una creencia errada, la nasa nunca entró ningún monstruo en el mar, simplemente muchos aseguran que esta área no es objeto de estudio para ellos debido a sus condiciones adversas de las cuales hablaremos más adelante.
¿Por qué no se explora el fondo del océano?
La mayoría de científicos coinciden en que se ha estudiado el espacio con mayor empeño, puesto que es un espacio menos hostil que el océano, así que una de las razones por la que la nasa dejó de explorar el océano es por un tema físico.
El océano es un espacio frío y denso, la presión aumenta mientras se desciende en él y debido a esta presión es mucho más complicado ir más allá, el fondo del mar se ha explorado en pocas ocasiones, ya que mientras más profundo es, más presión y esto aumenta el peso sobre el cuerpo.
Por otra parte, a través de la tecnología satelital se han logrado grandes resultados y conocimientos acerca del océano, sin embargo, gracias a los grandes cambios a nivel tecnológico es posible cartografiar todo el océano en 5 años.
¿Por qué gran parte de los océanos no se ha explorado?
Los científicos han logrado tomar fotografías y datos de diferentes áreas en el fondo del mar, han logrado aterrizar naves espaciales en marte y en la luna, aún existen grandes enigmas en nuestro planeta, específicamente en el fondo del mar.
Para muchos expertos el mar es todo un desafío, en el fondo del mar la visibilidad suele ser casi nula y las temperaturas extremadamente frías, así que para ellos es mucho más fácil enviar personas al espacio que al fondo del océano.
Por otra parte, los submarinos no son la única forma de explorar o estudiar los océanos, seguramente podremos aprender increíbles lecciones del espacio, múltiples científicos se han enfocado en tecnologías satelitales con el firme objetivo para registrar todo lo que sucede en él, así como la distribución del fitoplancton, la cual puede cambiar rápidamente o duplicarse.
Todas estas tecnologías se han utilizado desde la década de 1970 y los satélites podían capturar imágenes detalladas del océano en solo minutos, mientras que en un barco el proceso puede tomar años para recopilar la misma cantidad de información que para un satélite puede llevar minutos.
Las tecnologías de exploración del océano han recorrido un largo camino y gracias a la tecnología ha crecido a pasos agigantados, sin embargo, muchos científicos afirman que la exploración del océano puede ser perjudicial porque puede destruir los hábitats, así como la vida marina.
En múltiples ocasiones estas expediciones pueden ocasionar contaminación acústica, lumínica y afectar todo el océano, además de dañar a las especies migratorias.
Finalmente, la nasa dejó de explorar el océano principalmente por la presión en las profundidades lo que lo convierte en un entorno realmente difícil de explorar.